Las estadísticas del consumo de neumáticos se mantienen en números altos debido, en una buena parte, al descuido de la presión de los neumáticos en general. Que los neumáticos se mantengan con unos niveles de presión adecuados es importante para la salud tanto de los mismos para la economía de los propietarios ya que una mala presurización de los neumáticos repercute directamente sobre el mayor deterioro de los mismos y sobre un mayor consumo de combustible.
Por esta razón ha sido diseñado el controlador de presión de neumáticos Whistler TS-104. Este controlador dispone de unos sensores impermeables de alta precisión capaces de detectar y notificar cuándo los neumáticos se encuentran con una presión inadecuada. Incluye un monitor LCD que se instala fácilmente en el tablero del coche desde el que es posible atender las notificaciones y ver el estado de presión de los neumáticos. Incluso es posible ajustar las notificaciones en función de las necesidades de cada conductor.
Todas estas características lo hacen un producto sumamente útil capaz de permitir un ahorro a largo plazo tanto en combustible como en consumo de neumáticos. Pero más allá de lo meramente económico, el uso de Whistler hace además de la conducción, algo más seguro ya que tal como se ha demostrado, una mala presurización de los neumáticos aumenta el riesgo de pinchazo en carretera y, por tanto de accidente.
Una de las razones por las que la presión de los neumáticos es un aspecto tan olvidado es por la incomodidad que supone parar en una gasolinera antes de iniciar cada trayecto para realizar el típico proceso de comprobación de la presión. Éste es el aspecto fundamental que Whistler ha pretendido solucionar a través del control mediante sensores de los neumáticos y la visualización de su estado a través de un display digital que se encuentra a golpe de un solo vistazo en el tablero permitiendo en todo momento una conducción segura sin despistes.
Whistler se ha posicionado como una solución inteligente para conductores inteligentes que entienden la importancia del mantenimiento óptimo de un vehículo, tanto por economía, como por seguridad.